no esperar de la vida, para no arriesgarla; darse por muerto para no morir. Asi llevaba sintiendome los ultimos 8 años de mi vida, y ahora desperte del letargo.
lo cierto es que fui estupido por no interesarme antes por el lenguaje no verbal, tenia un libro, lo compre cuando cristina y yo aun saliamos al centro, que ya hace años, y sigue en la estanteria lleno de polvo, idiota, si lo leyese antes sabria que a un mentiroso se le coje por otros gestos no por los que yo pensaba, pero bueno, aun me queda tiempo.
la 1 frase de esta entrada esta en la p 32 del libro la invencion de morel de adolfo bioy casares, edincion las mejores novela de elmundo
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